Una de las entrenadoras del programa nos abre las puertas del vestuario de un equipo auténtico.
Leire Rodriguez (Vitoria, 1999) aterriza este año por primera vez en la familia de la Fundación 5+11, una joven técnica amante del baloncesto y con una empatía especial que hoy desarrolla en uno de nuestros proyectos más ilusionantes. Una vida ligada al baloncesto defendiendo los colores de Araski, donde continúa actualmente compitiendo al máximo nivel desde su Primera Nacional. Además sigue formándose como entrenadora.
A pesar de su juventud esta joven se encarga de entrenar en Baskonia4Life al equipo formado por chicos y chicas con síndrome de Down, el programa social que tanto la Fundación como Baskonia desarrollan con diferentes colectivos de nuestra comunidad utilizando el baloncesto como principal herramienta de integración.
Queremos conocer mejor, desde su punto de vista, como es el trabajo diario y qué le aporta nuestro equipo, formado por deportistas con síndrome de Down pertenecientes a la conocida Asociación Down Araba-Isabel Orbe, con la que la Fundación 5+11 colabora estrechamente desde hace tiempo.
F: Es tu primera experiencia gestionando un equipo de personas con discapacidad ¿Qué tal has aterrizado en el equipo?
No puedo estar más contenta, tanto los chicos y chicas de Down Araba, como las demás entrenadoras son personas con los que da gusto trabajar. No sólo se lo pasan bien ellos, si no también nosotras entrenándolos. Y además, al igual que ellos aprenden de nosotras, nosotras aprendemos muchísimo de ellos. Es un intercambio muy bonito y enriquecedor.
F: ¿Cuál consideras que es el objetivo de este proyecto?
El objetivo está claro, principalmente la inclusión social y la igualdad de oportunidades.
F: ¿Qué supone para ti, participar en este proyecto?
Es un proyecto nuevo y a la vez diferente para mí, por eso creo que es una forma distinta de aprender y de crecer como persona. Mis compañeros y compañeras me ayudan mucho y sin duda está siendo una experiencia increíble.
F: ¿Cómo es el trabajo diario en BKN4LIFE?
La preparación de los entrenamientos es diferente a un equipo convencional, porque hay que cambiar y adaptar algunos ejercicios para que todos puedan hacerlo. Normalmente les separamos en dos grupos para así poder trabajar cosas diferentes con ellos. Aunque hay veces que preparamos entrenamientos que pensamos que van a salir bien y de repente nos damos cuenta de que no sale bien y tenemos que cambiar rápido a otro ejercicio.
A parte, creo que se necesita más paciencia e implicación, en general un entrenamiento requiere mucha energía pero es muy reconfortante. Al final lo que te aportan ellos es mucho más de lo que tú das.
F: ¿Crees que el Baloncesto es una buena herramienta integradora?
Sin duda alguna. El baloncesto es un deporte en equipo, participar en una actividad así le hace a cualquier persona sentirse parte de un grupo e integrarse en él. Es una forma divertida de conocer a gente, te permite aprender a trabajar en grupo, a relacionarte, a respetar unas normas… Para mí lo más importante es que te hace sentir parte de un equipo y además creo que nos enseña mucho tanto a ellos como a nosotras.